Lo malo del domingo es que mañana es lunes.

¡Qué calor que hace Dios mío!, ya mañana lunes de nuevo y empieza la rutina.
Mañana tengo decidido ir al gimnasio y decirle a la chica que me haga una lista de ejercicios, vamos, una rutina. En mi país así comencé y me fue bastante bien, así que decidido eso haré ahora. Iré a las 7, haré una hora y 15 minutos de la rutina, y luego una clase en la piscina.
Ya basta de tonteras, quiero hacerlo, aunque pienso, puede ser otro intento infructuoso pero bueno, lo intentaré. El gym para mí veo que es la solución.
Con respecto a mi jefe, él se acercó a mi oficina el viernes y me dijo "
¿Javier estás estresado? ¿Por qué? nuestro período de estrés pasó." Y eso me hizo pensar que quizás realmente era yo quién me estresaba más de la cuenta, que realmente, la presión que siento, no está tan latente como yo creo.
Espero que sea así, quizás solo yo me confundía más de la cuenta.
Mañana me voy a levantar y voy a preparar por fin mi exposición para él, terminaré el artículo y expondré sobre el método, para hablar luego de como generalizarlo, para luego saltar a nuevos métodos.
Esto sé que no lo entenderán, es un orden que estoy haciendo en forma mental.
Ya veremos que pasa. Debo prepararme para dos congresos, congresos que me ayudarán a cambiar de aires.
Siento el ánimo, y voy a hacerlo, porque como dicen, yo soy el dueño de mis destino. Por cierto, comencé a usar flores de Bach, ya veremos si me funcionan.
Un abrazo a todos, y gracias por leerme.
Javi.

Tengo pena.

La verdad es que soy un fiasco con esto de tener un blog. La verdad es que escribir lo que como todos los días y cosas así, no va conmigo. Pero hoy día tengo pena, y como no sé a quién decírselo, lo escribo.
Tengo como pena en el corazón, y es una mezcla de distintos cosas, nervios, angustias, ansiedad, está todo mezclado.
Realmente me siento tan cansado mentalmente, que no me dan ganas de nada.
Estoy ahora mismo en mi oficina, y tengo pena, siento el pecho oprimido y me gustaría ponerme a llorar, pero es que no sé porque. Sólo sé que no tengo ganas de nada hoy día, y eso me hace sentir raro.
Que raro es tener esa angustia de no saber que hacer para remediarla.
Solo pienso que mi vida se arreglaría si yo renunciara a este doctorado. No soporto la presión, no tengo ganas, sencillamente me gustaría huir, quiero estar una semana acostado sin tener que levantarme a estudiar un tema que no le importa a nadie. Quisiera tener a mis amigos cerca, pero la verdad es que me he distanciado, y aún así, están en mi país, yo en España, no es una buena opción. Tengo como pena en el corazón, y eso me tiene cansado...
Necesitaba escribirle, creo que hoy les escribiré a mis dos amigas con quienes no nos hablamos de hace mucho, pero que quiero mucho...
Ojalá se me pase esta sensación en el corazón, ojalá que sí...
Saludos,
Javi.